Actividad física en la pubertad

Actividad física en la pubertad

En la actualidad las actividades relacionadas con el tiempo libre (denominada amateur) en la población infanto-juvenil cambiaron significativamente por el hecho de que ésta fue aumentando al ritmo del resto de la sociedad y por la gran variedad de entretenimientos que ofrecen las nuevas tecnologías.

Es oportuno aclarar que para definir el término de población infanto-juvenil es necesario tener en cuenta que comprende las edades de 12 a 17 años. La pubertad, adolescencia inicial o adolescencia temprana es la primera fase de la adolescencia y de la juventud.
Se entiende como tiempo libre a aquel período del día no sujeto a necesidades ni obligaciones. Por otro lado, el ocio supone sentirse libre realizando diversas actividades. La tendencia a agrupar la jornada escolar, la televisión, los videojuegos e internet traen como resultado que la población infanto-juvenil dedique una parte mucho mayor de su tiempo libre a actividades de tipo sedentario.
Un estudio realizado en la Argentina en el año 2004 menciona que llevar un estilo de vida sedentario trae aparejado, no solo enfermedades crónicas y neurodegenerativas, sino que, además, tiene un alto costo económico para el país.
Por este motivo se considera fundamental crear programas de actividad física, las cuales mejorarían las condiciones para estimular el desarrollo óptimo de los procesos de desarrollo y maduración en todo sentido, tanto físico, emotivo, psíquico como cognitivo. Con respecto a ésta última, existe evidencia empírica que sugiere que la práctica de actividad física trae consigo beneficios sobre el rendimiento académico de niños y jóvenes (Honneford 1995).
¿Cuáles son las diferencias en el desempeño escolar de la población infanto-juvenil que realizan actividad física en relación con aquella población infanto-juvenil que lleva una vida sedentaria?
Al llevar a cabo una práctica regular de ejercicio físico ¿Contribuirá a mejorar en el alumno su rendimiento escolar?
Por medio de los estudios realizados en diferentes países a lo largo de las últimas décadas y mediante el análisis de los resultados obtenidos por una investigación realizada en la ciudad de Posadas, se pudo afirmar que existe una correlación directa entre la actividad aeróbica, la memoria visual y las funciones cognitivas de ejecución y control, así como de la memoria de trabajo. Del mismo modo se retrasa significativamente la degeneración neuronal.
“El ejercicio cardiovascular es el que más beneficios reporta a nivel cognitivo para la población infanto-juvenil. Este tipo de ejercicio aumenta la concentración de neurotransmisores que modulan procesos cognitivos. La memoria y la atención son algunos de estos procesos cognitivos beneficiados mediante el ejercicio físico”.
En la actualidad, aspectos como la práctica deportiva para mantener un estilo de vida saludable o mejorar los niveles del sedentarismo están muy presentes en muchos grupos sociales. En cambio, el deporte o la actividad física desde una mirada psicopedagógica no es una temática frecuentemente abordada.
Partiendo del objeto de estudio “el sujeto en situación de aprendizaje”, el psicopedagogo juega aquí un papel fundamental, por el hecho de que esto nos posibilita a la intervención, acompañamiento y orientación de aquellas personas que se dan un lugar, en este caso, de seguir aprendiendo.
Lic. Ruth Sachetti
RIE (Red de Inteligencia Emocional) Posadas

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